La experiencia comenzó con el sensei de los viajes: mi amigo Mario Arreola, había que cenar en Tokio después de un viaje de más de un día desde el sur de Japón y se tenía que hacer con estilo.
Me dijo que cenaríamos con mucho estilo en un lugar que le gustaba mucho cuando vivió en Japón, y que me dejara llevar, por un momento pensé en una cena tradicional japonesa pero no fue así. Nos dirigimos en taxi (ahí comenzó el lujo) al hotel New Otani, al llegar al lobby bajamos al sótano y comenzó la aventura, se trataba de uno de los restaurantes/bar Trader Vic´s de cocina polinesia y hawaiana, todo el lugar esta decorado como si estuviéramos en una de las islas que rodean a Papeete en la Polinesia Francesa, había esculturas de madera, plantas naturales, los muros y el techo perfectamente decorados como si fuera una palapa, inclusive con unos catamarán tradicionales, música y un servicio excelente desde la llegada hasta la salida. La degustación culinaria comenzó con una sopa servida en una gigante concha de caracol, trozos de cerdo, pollo y camarones en salsas de papaya, palmitos y cocidos en hojas de plátano y además estuvimos bebiendo un delicioso coctel Tiki-tiki que nos sirvieron en una jarra que tenía banderitas y era delicioso. Llego un momento que el ambiente me hizo olvidar todo el viaje en Asia y me sentí en otro mundo.
Trader Vic´s es una marca con restaurantes en las más impresionantes localidades, inicio en 1934 en Oakland, su restaurante más sofisticados están en los Emiratos Árabes Unidos.